Cuando el cansancio y la tensión aumentan solemos coger el coche y huir de nuestro entorno habitual. Son numerosos los rincones que elegimos para estas escapadas, pero sin duda uno de nuestros lugares favoritos es Cantabria. No tenemos reparo ni pereza para hacernos en día y medio hasta mil kilómetros entre ir, volver y las visitas que realizamos por los alrededores. Cada vez realizamos una ruta diferente aunque hay sitios que repitamos. Mezclada toda la ruta saldría un guiòn así:
Visitamos Castro Urdiales, precioso pueblo del cantábrico donde destaca su enorme colegiata. Podemos comer una suculenta zarzuela de mariscos en "El Segoviano", restaurante que se encuentra en los porches de un edificio en el centro histórico de la villa. No dejamos de visitar las impresionantes playas de de Santoña y Laredo. Es de obligado cumplimiento tomarse un refresco junto al mar y probar las riquísimas anchoas. En una de las ocasiones que realizamos nuestro viaje nos alojamos en el hotel "Aires de Ruesga". Antiguo edificio que perteneció a un noble del pasado que hizo fortuna emigrando a América. Cada habitación del hotel es diferente. Se respira paz y tranquilidad como nadie puede imaginar. El paisaje es espectacular. Escucho un sonido que ya había olvidado, algo tan normal para unos y tan extraordinario para mí como el canto del gallo y el bufido de las vacas. Temprano por la mañana hacemos con el coche un recorrido por el río Sarón que nos llevará a ver paisajes bestiales, cascadas...
Después de visitar pueblecitos de gran encanto, como Villarcarriedo, vamos a Selaya, allí comeremos en el restaurante "posada de valvanuz" cantidad y calidad. Tomamos unos pimientos rojos asados con anchoas, revuelto de foi y un sabrosísimo e inigualable solomillo y entrecott mi mujer y yo respectivamente. En otra ocasión en invierno nos hemos metido un cocido montañés, algo que no se puede contar con palabras.
En otras ocasiones nos hemos alojado en Treceño, en el hotel "Palacio de Guevara", es de mis hoteles favoritos. Caserón en el que llegó a alojarse en su momento el emperador Carlos V. También cada habitación es diferente. De pronto te sumerjes en la época medieval sin escapar de las comodidades que nos ofrece el s. XXI. Se come por cierto también muy bien destacando el menú que ofrecen con cuatro o cinco primeros y los mismos segundo. Excelente relación calidad precio. En los alrededores podemos ir a visitar Santillana de Mar, ¿quién no ha oído hablar alguna vez del pueblo más bonito de España?. Sus calles empedradas, la colegiata... su zoo, las famosísimas pinturas rupestres de Altamira... Un excelente menú lo podremos degustar en el restaurante "los blasones". Muy próxima está la elegante localidad de Comillas, cuna de ilustres personajes. En alguna ocasiòn nos hemos alojado en el moderno hotel "Golf Rovacías". Destacan sin duda la Universidad Pontificia y el "Capricho" del genial Gaudí. Por la noche recomiento una cena en el restaurante de este edificio catalogado como bien cultural y una de las obras más famosas de este arquitecto único. Elegancia, glamour... Seguiremos nuestra excursiòn visitando la localidad de San Vicente de la Barquera donde la montaña y el mar parecen vivir un eterno noviazgo.
Siguiendo hasta Asturias nos desviaremos en Unquera para ir dirección Potes. Durante el camino atravesaremos el Desfiladero de la Hermida, imponente paisaje. Es el segundo desfiladero natural más grande del mundo después de el de Colorado. Pararemos a visitar Potes donde destaca la Torre del Infantado, actual ayuntamiento. Si tenemos la oportunidad de llegar en un día que se celebre feria de ganado podremos ver in situ la personalidad de estas gentes, muchas venidas de las montañas. Fuertotes, bonachones, vaqueros... gente de montaña, gente que vive en la naturaleza soportando la dureza y la belleza de la misma. Pasando Potes nos hemos alojado en alguna ocasiòn en el Hotel del Oso. La comida es bestial, su cocido liebanés resucita a un muerto. Los desayunos que ofrecen son espectaculares. Más allá de Cosgaya visitamos Monebrego y seguimos hasta los Picos de Europa. Subimos en funicular hasta lo alto. Las vistas deben de ser impresionantes, digo deben porque cae una intensa nevada y todo lo vemos blanco. En otro de nuestros viajes nos alojamos en el Parador Nacional de Fuente Dé, es el lugar ideal para descansar y escuchar sin parar la música del silencio.
Más allá del desvío en Unquera seguimos hasta Cangas de Onís y visitamos la basílica de la Virgen de Covadonga y ascendemos por una carretera no apta para cardiacos hasta los lagos de Covadonga. Sin palabras por la belleza del entorno. Próximo y hacia Cantabria de nuevo no podemos dejar de visitar las Cuevas del Soplaó.
Entre todos estos recorridos nos encontraremos por Cantabria otros pueblos de enorme belleza, como Bárcena Mayor, pueblecito que más parece un museo anclado en el pasado. Vega de Pas, donde compraremos quesadas y sobaos.
Bueno, éste es más o menos el recorrido que hemos hecho cada vez que hemos ido por Cantabria, unas veces unos sitios y otras otros.
ESCAPADAS DE FIN DE SEMANA.
ESCAPADAS DE FIN DE SEMANA.
ESCAPADAS DE FIN DE SEMANA.
